LOU o la importancia de escarbar

Me da igual si alguien piensa que me repito como las lentejas, defiendo lo que pienso. Y lo que pienso no es algo inamovible, depende de lo que voy observando, escuchando, experimentando...En definitiva, tiene mucho que ver con mis vivencias. Y por supuesto que varía, gracias a la experiencia, a la gente que me rodea, a mil y una circunstancias.

Recientemente, una tocaya mía, La profe Raquel, puso en Facebook un corto de Pixar que no conocía, LOU. Hasta hace un rato, desvelada como estoy, no había tenido ocasión de verlo. Muchas gracias Raquel, creo que compartimos más cosas que nombre y profesión. A mí tampoco me parece un corto sobre el bullying. 

Lou me ha hecho recordar a aquellos alumnos que muestran una conducta inadecuada, que podemos calificar como disruptiva, y que no sabemos muy bien por qué actúan como lo hacen.

Y justo ahí, en ese punto, es en el que veo, la necesidad de escarbar. Sí, tal cual, intentar ahondar, prudentemente pero sin miedo, en los motivos que hacen que no se porten bien, por decirlo de una manera sutil. Ya, no es fácil, soy la primera a la que a veces le cuesta intentar indagar en las razones que le llevan a un alumno a tener un mal comportamiento sin perder la calma. A pesar de las dificultades, os animo a ello. 

Aunque estos alumnos no colaboren (al principio), quizá se muestren reacios a cambiar o simplemente se nieguen a compartir qué les pasa (ojo, no hay que obligar a nadie). Me parece que las cosas caen por su propio peso y llega un momento en el que ellos mismos no pueden más, les resulta imposible cargar con tanto "peso" ellos solos. Dadles una oportunidad, quizá ellos no se den cuenta, pero creedme, estos niños, nos necesitan. Y además nos necesitan mucho, incluso mucho más de lo que ellos imaginan. Lo que planteo no es imposible, cuando un alumno llama la atención continuamente, es por algo, no es fruto de la casualidad. Esperad con los ojos bien abiertos, los oídos atentos, el momento llega, aunque tarde en llegar, siempre llega.