jueves, 22 de marzo de 2018

...Hablando en verso

Hay días en los que se acumulan las celebraciones. Antes de ayer fue el Día Internacional de la, ni más ni menos, FELICIDAD. Sin tiempo para nada, lo dejé pasar, a sabiendas de haberlo incluido ya el año pasado en este blog. Y principalmente porque las 24 horas del día ya no dan para más...Y la salud es lo primero.

Ayer 21 de marzo fue una de esas celebraciones corresponde a la Poesía. Me he dado cuenta al rebuscar por internet que, para bien o para mal, hay un día mundial para casi todo. A este paso voy a conmemorar el "Día mundial de las Ojeras", para todos aquellos que, como yo, luzcan a menudo un look panda, mapache, de koala o similar. ¿Alguno se anima? No sé, algo en plan solidaridad entre los ojerosos del mundo, no suena mal. Ojeras a un lado, regreso a los versos.

Entre lo que he encontrado en internet, me ha gustado mucho un artículo de El Periódico, que incluye 5 poemas clásicos y 5 actuales. No dejéis de mirarlos.

Elegir poemas me resulta complicadísimo, porque hay muchos que me encantan. Quiero evitar repetirme, así que esta vez me he decantado por estos tres (pero...¡hay tantos tan especiales!).

  • NO te rindas, de Mario Benedetti. Esta poesía es adecuada para cualquier momento. Una delicia. La pongo pensando en todos aquellos que puedan necesitar una mano amiga, un abrazo en forma de versos.


  • Malos tiempos, de Karmelo C. Iribarren.  Descubrí a este poeta de pura casualidad gracias a una poesía que compartió en Facebook Rebeca Martín, mitad de Unpuntocurioso. Os invito a leer su poesía. No tiene absolutamente nada que ver con Benedetti, pero me encanta la manera de contar historias, plasmar sentimientos...a través de los versos. Actual, directo, cercano.
  • La saeta, de Manuel Machado. Recité esta poesía en clase de Lengua con don José Antonio, al que todo el mundo llamaba, y lo digo cariñosamente, "El búho." Se me olvidó la hoja el día que el pidió que algunos volvieran a recitar su poesía, y no pude salir de nuevo. Me dio mucha rabia, pero de los despistes se aprende. No pensaba que le hubiera gustado cómo la dije, qué equivocada estaba. Él es uno de esos docentes a los que, no sabes muy bien el motivo, pero siempre recordarás. La gente olvida a Manuel, y al hablar de Machado solo piensa en Antonio...Me gusta mucho este poema, muy apropiado para la Semana Santa que ya asoma.
Por estas poesías, y por todas las que os pueden encandilar, emocionar, hacer vibrar, despertar, animar, calmar, llorar...os pido un favor: Leed, en prosa o en verso; libros "breves" o largos; cómic; libros ilustrados...Vosotros decidís qué, cuándo y por qué, pero Leed.

No hay comentarios:

Publicar un comentario