sábado, 16 de enero de 2021

Filomena, vuelta al cole, ¿preconfinamiento? y música

 Hace una semana "Filomena" estaba haciendo de las suyas, tiñendo de blanco muchas provincias españolas. Como consecuencia, Madrid manga por hombro, nieve para dar regalar y, en lo que me toca de cerca, retraso en la "vuelta al cole". Finalmente, regresamos a la rutina escolar el martes 12 de enero, ni tan mal. A medida que faltaban menos kilómetros para llegar a Peñaranda, más navideña era la estampa ante nuestros ojos. Ya allí, la sensación de haber tirado desde el cielo la nieve con cubos, qué barbaridad. En los 4 días de clase, misión imposible hacer filas en el patio, casi todo ese espacio seguía ocupándolo la nieve. Podéis ver las fotos y comprobarlo con vuestros ojos. 








Aunque cuesta retomar la rutina, mucho más en plena tercera ola del COVID, reconozco que la semana se ha pasado rápido. Para rematar la semana, meteorológicamente hablando, ayer viernes, "disfrutamos" de una hermosa cencellada en nuestro viaje a Peñaranda. Y en la vuelta a Salamanca, alrededor de las dos y cuarto, una niebla considerable nos despedía y nos acompañaba durante unos veinte kilómetros (o más).

Después de las vacaciones, me daba algo de miedo haber olvidado alguno de los nombres de mis alumnos...pero no. Nada más lejos de la realidad (menos mal). Reconozco que mi nivel de desconexión laboral fue muy alto, me hacía falta. Necesitaba descansar urgentemente y poner distancia (temporal) con mi labor docente porque, aunque me apasiona lo que hago, es agotador. Los maestros y profes me entenderéis, no lo dudo. Sí, hay muchas profesiones agotadoras y con unas condiciones nada buenas. Pero perdonadme, estoy harta, hartita, de escuchar "qué bien viven los maestros". ¡No veáis! tiene una parte buenísima, y otras cosas, no precisamente detalles insignificantes, duros, y no un poquito. Pero hoy no voy a entrar en ellos. Lo que no quita que repita una y otra vez, lo afortunada que me siento por dedicarme a algo que me encanta. Eso no lo puede decir mucha gente, ya también soy consciente de ello.

A ver si el lunes se han derretido ya los restos de Filomena en el cole, aunque no las tengo todas conmigo. Ya veremos je, je.

Mientras tanto, en el aire, llevan unos días volviendo a flotar las palabras "confinamiento domiciliario". Y, ¿qué queréis que os diga? Tiemblo solo de pensarlo. Me da en la nariz que no lo encararía igual, de algo bueno tiene que servir el "encerramiento" desde el 14 de marzo hasta el 2 de mayo del olvidable (no para todo) 2020. No sé si nos libraremos de estar nuevamente confinados, ni en qué términos sería este segundo confinamiento. Creo que, pase lo que pase, es importante intentar mantener la calma y una actitud positiva. Sí, el 2021 ha empezado movidito, pero todo esto no puede ser eterno, ojalá nos libremos del "bicho" antes de lo que pensamos.

Y en el título he puesto "preconfinamiento", porque las restricciones han ido aumentando. A estas horas no tengo ni la más remota idea de cuál va a ser el toque de queda en Castilla y León en unas horas. Aunque mi instinto femenino me dice que ni el Presidente de la  Junta está seguro de cuál será. Ellos (Junta Castilla y León), hablaban de toque de queda a las ocho de la tarde, y restringir las reuniones sociales en lugares cerrados a un máximo de cuatro personas no convivientes (o eso he entendido). A ver si se ponen de acuerdo unos y otros y nos dicen, con seguridad, las restricciones aplicables, sean las mismas o unas medidas endurecidas.

Pero no todo van a ser preocupaciones. El jueves escuché una canción que ya conocía pero, no alcanzo a entender el porqué, llevaba demasiado tiempo sin volver a escuchar. Es del Kanka, se trata de "El día de la suerte de Pierre Nodoyuna". Un canto plagado de optimismo, y hace falta, mucha falta...¡Disfrutadla!


La vida, sin música, no tiene sentido...Para que luego anden "regateando" sus sesiones en los centros educativos, ¡qué pena!

Nos confinen próximamente o no, disfrutad del día a día. Bueno...¿qué digo? Del segundo a segundo, demostrad al resto del mundo que sois del grupito de personas que sí ha aprendido algo bueno gracias al/por culpa del confinamiento de parte de 2020. Saldremos de esta, pero mejor si es unidos, pese a las trabas que nos encontramos en el camino (y no son pocas). Ya habrá momentos para entregar los abrazos guardados (como los dé con intereses algunas personas van apañadas ja, ja, ja...) y para recuperar el contacto social y disminuir la distancia que ahora pretende separarnos. Es complicado, pero imposible no. 

De momento me encantaría que cada cual encontrara su refugio y/o paraguas para lo que estamos viviendo. A mí la vida me dan mis convivientes, los contactos con no convivientes contados con menos dedos de los que hay en una mano, y los detalles, vengan en una forma u otra. Eso, el "trabajo", que me ayuda a centrar mi atención en otros asuntos, muy importantes también; y cómo no, mis aficiones. La de fotos y dibujos que me quedan por hacer,  textos por escribir, viajes por disfrutar, sueños por cumplir, amor por dar, cariño por compartir y celebraciones por disfrutar. Buenas noches (madrugadas) y a pasar el fin de semana de la mejor manera posible.

La ilustración es de 72 Kilos...

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