miércoles, 14 de febrero de 2024

Compartir

Desde que era pequeña el 14 de febrero se ha celebrado el Día de San Valentín, más popularmente conocido como el "Día de los Enamorados". Desde hace unos pocos años, sale como el "Día del Amor y la Amistad".  Me parece secundario llamarlo de una manera u otra. Pero hay ocasiones en las que tengo un runrún, positivo, que me anima a escribir.

El 14 de febrero hay que celebrarlo los 365 días del año. Y este 2024, por eso de ser bisiesto, los 366. Aunque no me parece que sobre poner un día concreto. Y cada cual que lo celebre antes, después, o en la fecha. Si no quiere, que no lo celebre por supuesto.

Perdonad si no están lo suficientemente hiladas, pero son ideas al vuelo y tengo muchas ganas de dejarlas aquí plasmadas. 

Os animo a celebrad el amor propio. Sí, quereros. Quereros con locura, valoraros, miraros con cariño en el espejo, por dentro y por fuera. Abrazad vuestros miedos e intentar aprender a convivir con ellos, intentando que os frenen lo menos posible. Y ojalá los superéis. Sed sinceros con vosotros mismos. Y claros con aquellos a los que más queréis. Expresad en voz alta o con susurros, vuestras ilusiones, deseos, gustos y desagrados. Y no os conforméis.Si bien nadie os va a querer nunca de la manera en la que a vosotros os gustaría, eso no quiere decir que el amor sea menos. Cada uno se esfuerza por amar de la mejor forma posible.  El amor ha de ser libre, y no me refiero ahora solo al amor a uno mismo, sino al denominado amor "romántico", al de pareja. Sentiros libres para amar. Pensad en lo que os gusta a vosotros, pero tened muy presente qué es lo que le gusta a esa persona con la que deseáis compartir risas y lágrimas, preocupaciones y tranquilidad, conversaciones y silencios, miradas y besos, miedos y seguridades, nervios y aburrimiento, placeres y sinsabores, ilusiones y vida, caricias y espacios, abrazos y cuidados, mimos y tiempo, secretos y proyectos (comunes e individuales)...

Celebrad ese amor romántico también, valorad la fortuna de coincidir, una y a veces más de una vez, con alguien dispuesto a compartir la vida con vosotros. A mí me parece maravilloso lo de cumplir años con la misma persona al lado. E ir añadiendo alegrías, batallas, momentos duros y otros mucho más dulces. Gracias por tanto, ya sabes que esto va dedicado a ti. Te amo.

Los puzles solo encajan si las piezas arriman el hombro para sentirse colocadas. A veces eso lleva su tiempo. Y no hablo de enchufes, sino de dar a cada cual su espacio y reconocerle su lugar. Creo que al final, en cualquier ámbito de nuestra vida, con mayor o menor acierto, todos buscamos encajar. Encajar con nuestros amigos, nuestra familia, y nuestra pareja. También con las personas de nuestro entorno laboral. Y de ahí, en realidad de cualesquiera de los ámbitos de nuestra vida, formamos círculos humanos. De algunos de ellos, no tienen por qué ser demasiadas personas, brotan plantitas hermosas. Algunas de compañeros, otras de amigos, y rara vez, porque me parece dificilísimo, de pareja. Y a lo mejor eso es algo que siempre hay que celebrar, como si todos los días fueran 14 de febrero: la alegría de coincidir.

Me suena que alguna vez he hecho referencia a un profesor mío ya fallecido, don José Antonio. Tuve clase con él de Latín y de Lengua castellana y Literatura. Recuerdo algo que nos dijo en más de una ocasión. A los padres no hay que quererlos, hay que amarlos. El año pasado sabéis que perdí a uno de los amores más grandes de mi vida: mi padre. Papá, este 14 de febrero también vas a estar presente, lo sé. Y cada día, mes, año...Y ese hilo está unido al de mi madre y mi hermano. Gracias, muchas gracias.

Tengo una suerte  bárbara al sentirme amada desde muchos puntos distintos. Cuento con unos amigos estupendos, con los que es una suerte compartir, lo que sea. Y sentir la paz de poder decir en voz alta lo que pienso y lo que siento, sin miedo a su reacción. O con miedo, pero queriendo compartir con ellos lo que me pasa en cada momento. Y agradeciendo que respeten cuando no quiero abrir el pico, porque también me sucede eso, eso de no querer hablar de lo que ronda por mi cabeza. Gracias a todos en los que estoy pensando al escribir este email. 

El amor, del tipo que sea, espero que os haga sentir más vivos. Que os recuerde lo bonito y especial que es compartir la vida con otros seres humanos, sean familia, amigos o pareja. 

Mirad a vuestro alrededor y valorad y agradeced todo ese amor que dais y os dan. Así que, sean cuales sean vuestras circunstancias personales, celebrad la vida con amor. Feliz 14 de febrero a todos.

Comparto algunas imágenes de mi admirado 72 kilos. Y un popurrí de frases de Nahuel Roldán.










No hay comentarios:

Publicar un comentario