miércoles, 27 de febrero de 2019

Reencuentros que suman: Guijuelo es mucho Guijuelo

Vaya suerte la mía. Eso de haber "llegado" a algunas personas y, una vez que ya no puedes estar con ellas (a diario), sigan queriendo saber qué es de mi vida. 

Os sitúo. Esta mañana me tocaba cuidar el patio. Me avisan en el recreo que en la verja del cole hay un "chico" que pregunta por mí. A cierta distancia no distinguía muy bien quién era, pero al dar dos pasos ya veo de quién se trata.

Gracias  Kaio, me ha encantado verte y poder ponernos un poco al día en 10 minutos. Espero que nos tomemos ese café pendiente antes de que acabe el curso. Haré porque así sea. Qué alegrón. Va camino de tres años que no pude seguir en el Vía de la Plata, y reconozco que mis alumnos y alumnas del instituto sois muy especiales, porque rompisteis muchos de los esquemas que tenía hasta ese momento. Siempre digo que de todo lo que me ha pasado a nivel laboral, que no es moco de pavo, mi mayor punto de inflexión en estos casi 11 años, fue el IES Vía de la Plata. El funcionamiento tan distinto de un instituto respecto a un cole, los compañeros y, los "protas", los alumnos...Una experiencia única.

Fue una lucha brutal, un tira y afloja diario, aunque hubo muchos instantes maravillosos, impagabales, que ni quiero ni puedo olvidar. Tranquilo que lo que digo (de la lucha y el tira y afloja), sabes que va para casi todos. Tener que "luchar" con unos y con otras era el pan nuestro de cada día. Ver esa sonrisa en tu cara vale millones y me has iluminado el día (y más). Verte bien, feliz, tranquilo, asentado...Sin palabras.

Todavía recuerdo algunos recreos, en los que apuraba los últimos minutitos en el edificio 1, hablando contigo. Poco me faltaba para bajar rodando hasta el edificio 2. Qué solos estáis muchos adolescentes y qué poquito se esfuerza la gente en entenderos (sin juzgaros). Y justo ahora me encuentro con una "emotirita" de Luis Aretio, psicólogo infantil, cuyo título es Si su adolescencia está en nuestras manos, tengamos "tacto." Pues sí Luis, mucho tacto, a ver si le entra a la gente en la cabeza.  Os invito a leer la emotirita de este psicólogo, con el que suelo coincidir en la manera de ver el mundo y a sus habitantes.

Kaio, tengo la sensación de que muy poca gente te llegó a conocer. No sé si yo te conocí de verdad, pero me gustó mucho todo lo que descubrí el segundo año, lo que había al rascar un poquito o al quitarte esa careta de gracioso. Gracias por tanta generosidad y, por supuestísimo, por tu confianza. Fue una gran suerte dar con alumnos como tú.

Se me ha olvidado preguntarte si sigues devorando libros, ojalá al menos sigas leyendo, aunque no sea tanto como antes. Muchas veces me acuerdo de ti, al leer algún libro que pienso que podría gustarte.

Pues eso, el mensaje es simple, pero muy potente: una vez más...¡Gracias!



2 comentarios:

  1. Soy testigo de lo que has llegado a muchos chicos, los que aún están en el instituto no preguntan nunca ¿qué Raquel? Gracias por lo que hiciste por muchos de ellos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. GRACIAS de corazón Gely. Ellos sí que llegaron a mí. Ver a Kaio fue un subidón de todo. Y vosotros, que JAMÁS me he reído tanto en comidas o quedadas, qué buena gente. Lo mejor de Guijuelo NO es el jamón (y mira que está rico), sino las personas que he conocido y estoy conociendo gracias a él.

      Eliminar